La ensalada de gallina tiene sus orígenes en los fogones más humildes de la Caracas de los techos rojos, aunque su fecha de creación no es exacta, los estudiosos de la materia aseguran que se ubica a principios de los años 40.
Se dice que con las sobras de los hervidos de gallina, algunas papas y zanahorias se preparaba este plato de manera muy sencilla y discreta.
Se trata así de la receta más versátil del plato navideño. Puede ejercer el rol de principal, de relleno y de guarnición. Incluso trasciende la festividad y se consume todo el año.